Día 1, viaje y llegada.

Comienzo del viaje...

Un día caluroso, las 0630 de la mañana, suena el primer despertador. Perezoso y vageante (vago maleante) retraso la alarma 5 minutos, unos 5 minutos que no llevan a ningún lado, y se vuelve a repetir el proceso al cabo de esos 5 minutos. Por fin reacciono, me lenvanto con gran pesar de la cama, esa cama que dejo atrás, como otras tantas cosas, cosas y no tan cosas. Personas, seres, gente, amigos y amigas, familiares y familiaras, y otros seres a los cuales es imposible catalogar por su extraña condición.

Despierto a mi fiel escudero, o eso creo yo, dado que ya estaba despierto, esperando mi llegada a sus aposentos. Se levanta, se viste, yo ya estoy vestido. Alforjas preparadas, nos dirijimos hacia la posada y exigimos al maitre su mejor desayuno, poca cosa, batido de fresas silvestres del bosque y poco más. Una bebida del mejor cacao de Costa Rica para mi acompañante. Terminado el tristemente llamado "desayuno", abrimos las puertas del averno, con las alforjas al hombro y hacia BilAur nos dirigimos (Bilbao Aeropuerto). Nos encaramamos al lomo de la bestia parda que nos llevará hasta BilAur y tras un breve pero muy ameno trayecto, llegamos a nuestro destino.

Mi fiel escudero me abandona, una gran pena, pero debe partir hacia el horizonte. Tras un breve respiro, la dama de cabello de fuego le espera.

Monto en mi bello corcel de hojalata, hojalata, sí, pero cual pegaso, con 2 alas mirando hacia el astro rey. Pasado un rato me reclama Morfeo y caigo rendido en sus garras, arrivamos a nuestro destino..... Un lugar llamado Italia!!!!

Están locos estos Italianos.. o Romanos... o quienes quieran que sean. Desde que aterrizamos, tardamos una hora en llegar a nuestro destino, una zona llamada Bovisa. Nos la venden como una zona universitaria, y es verdad, cerca hay 2 facultades, pero parece más bién un gettöh. Nos explican un poco el funcionamiento del metro y nos dejan libres. Para entonces, ya me había dado un ataque de alergia, de los gordos. Me tomo mi pastilla y ya soy un hombre nuevo. Vamos a comer y por la zona vemos bastantes sitios, decidimos probar algo nuevo, por lo que vamos al siguiente sitio

Pedimos al azar, dado que no conocemos bien los ingredientes, me toca algo con nueces. Por suerte, alguien me lo cambia (soy alérgico a las nueces) y me como esto, una especie de pan de pita relleno de lo que quieras.

Riquísimo, relleno de jamón, de rúcula y de una salsa, que no reconozco y en la cual prefiero no pensar. Salimos del fastfood y nos vamos a comprar, a un supermercado. Unos compañeros Canarios, nos han enseñado un poco el barrio y nos han recomendado algún que otro sitio. Compra muy muy básica, papel higiénico y poco más. Vemos la TV 5 minutos y llega nuestro contacto en Italia. Nos lleva a sacarnos la tarjeta de transporte (ATM) y a contratar tarjetas SIM para tener internet.

Vamos hasta el Duomo de Milano.

Una catedral, creo la 4ª más grande de Italia o del mundo, que se terminó de contruir en el año 2007, o tal vez el 2003 (no me acuerdo). Tenemos movida a la hora de sacarnos el abono para el transporte. Cierran a las 1730 y a las 1715 ya no quieren dejarnos entrar, nuestro guía se enfrenta a los guardias y se sale con la suya. Aunque no todos, la mitad hemos podido sacarnos el carnet (yo incluido). De ahí pasamos a sacarnos las tarjetas SIM, bastante buen precio, gracias a la cual estoy escribiendo. Pasamos a la misión más importante del día, comprar sábanas y almohadas. Dado que no hay y no he traido, había que traer, pero no lo entendí bien, jajajaja. No llegamos a buen puerto y no conseguimos comprar.

Algunas cosas curiosas: la gasolina cuesta en algunos puntos hasta 1,7€ el litro y el gasoil 1,5€. El tabaco es algo más barato y los pasos de cebra para los peatones tienen ambar.

La gente conduce un poco.... agresiva.... Hay tiendas abiertas los domingos, de todo un poco, y hemos tenido una sorpresa de última hora, una visita inesperada en el piso.

Un amigo o amiga para Pelusa, el gran gato del Averno. Otra curiosidad, hay contados restaurantes chinos, pero sí se ven restaurantes Italianos, llevados por Chinos. Ahora a dormir que estoy reventado y me quedo sin batería. Un saludo a quién lea esto y ahí va una foto mía.

Un saludo y un besazo, gracias compañero por haberme acompañado en el inicio de este viaje y a todas las personas, sin las cuales esto no sería posible, gracias por animarme y estar ahí y en especial

Imanol.